domingo, 19 de noviembre de 2006

SOMBRA MÍA

PRELUDIO

La sala de música está vacía
y entre paredes de escarcha
la mañana aborta lunas.
De voces y de palabras.

Ciudades enteras ardieron ante la música eterna
y la causa débil del placer.

De voces y de palabras en los ojos,
de amor y de muerte insurrecta.

Aún te recuerdo, girando absorta,
molino de aspas, marfil el ojo,
cuando el cielo tiembla y en los brazos suenan canciones de olvido.

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