viernes, 28 de septiembre de 2007

UNA HISTORIA NUESTRA

A veces, las historias no se pueden contar con palabras. Es cuando sucede la magia, cuando el mundo parece pequeñito al lado de su vientre.










































9 comentarios:

zöe riudavets dijo...

Jooo, cuantas historias se van acumuluando. Me gustan esos pequeños momentos atrapados en el tiempo. Me gusta. La escritora de las imágenes. La fotógrafa de las historias. Que grande eres

manolotel dijo...

Siempre diferentes y siempre maravillosos. Paisajes intimamente reconocidos.

Besos.

matias fernandez fernandez dijo...

maravillosa!

matias fernandez fernandez dijo...

Carmen,
entro,
visito
y siempre
me encanta.

un abrazo,
Matías

Anónimo dijo...

Las fotos son bonitas (alguna de ellas, más que eso).

Pero esa historia solo puede silbarse. (La letra es oculta, para unos pocos).

Anónimo dijo...

A mí me encantan las historias que se escriben sobre las piedras y los cielos mullidos.

Anónimo dijo...

Silbarla...

Qué fino, Nán. Me gusta eso.

... y dele, Zoe. A ver lo que saca del suyo (blog).

Anónimo dijo...

Vamos como eficaces máquinas de producir, incluso sin doparnos con la cafeína famosa.

Afortunadamente, por lo menos en tu caso, vemos que nos deleitas con poesía. Despalabrada, aunque simbólica.

Muy protohistórico y ancestral en este mundo tan tecnificado.

Güen 1/2 relax para un lunnes(s).

Peter dijo...

Menudo par.. de dos.

Me alegro de estar en esta parte de la barrera. Con muchas palomitas, viendo algo tan humano y tan bonito.

Olé la gracia, el arte, y estas dos niñas

besos, guapas.