Y estoy abriendo puertas
y estoy cada vez más cerca...
... de ti
Kico Gómez
No tengo más que la certeza
de que eres tú o mi contrario
la tierra que fecunda mis manos
e inclina mi voz.
Soy desde mañana la gota de agua
que recorre tu ombligo
y te como la boca
y me araño las ganas de lamerte.
Te miro desde la rabia de los que saben
que la causa está perdida
porque el universo son tus caderas
y tu sexo me da de beber
o tus ojos me abren las puertas
que llegan a ti.
Y aquí, parado y mirando afuera
me siento, tal vez, pequeño y herido.
14 comentarios:
Qué certeza tan bellamente verbalizada...
Un abrazo!!!
Del negro al blanco, al gris, que más nos dará el color si vuelcas una vida en cada palabra.
Poesía cristalizada, de tu sal marina.
Felicidade(s) por ser cada día mejor. Gracias por dejar acercarme y no errar por ello.
"me araño las ganas de lamerte"
uff...
inclino la voz
Mainumby, qué bien que te quedes. ¿No te ha pasado nunca? Digo, sentirte pequeñita. A mí sí.
Anónimo, y ese café que siguen pendiente... Estoy saturada de trabajo. Ya me conoces...
Aroa, yo me inclino entera ante ti.
Eres violenta y terrible.
Nos sacudes. Dónde, Dime Dónde.
Dónde (me ) guardas.
Si soy algo bueno o algo buena es porque me convierto en la suma de todo lo que me dais que es mucho. Dónde? Aquí, aquí mismo, P.49.
bonita luz, la del fondo, y los rizos...
un beso.
Claro que me ha pasado. La mayoría de las veces me siento incompetente, me siento pequeñísima...
Un abrazo!!!
Qué bien verte por aquí, Mariona. Espero seguir viéndote.
Mainumby,conocer nuestra pequeñez ante lo que nos rodea no está mal, sentirse incompetente sí. No te sientas así, ¿para qué?
Perdon... ¿es aquí donde lo de los pequeñitos? Verán... ¡Eh! oigan... que estoy aquí, aquí abajo...
Zen_tao, usted siempre tan sabio. Jejejeje. En breve estarán por aquí la Bugedo y el Comín, serán llamados por si se animan.
pekjekmee
Parece que a Anónimo le ha dado una alferesía...
Aprovecho este espacio para darle un CATE a la excelsa ama de este blog, que ayer, por puritita pereza, no vino con la peña del ICMAN (veintiuna personas, nos llegamos a juntar en el Balandro), después de haberse ella autoinvitado e insistido mucho en que iría... plugo al cielo para que la ira de los dioses más protervos descargue sobre su coronilla una más que justa venganza. No sé, que tenga que memorizarse toda la dizscografía de Enrique y Ana (un poné).
Amos que.
Contento me tienes.
No vea tú la nueva excusa, además: "es que tengo que darle de comer al gato".
Mí tú que...
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